Un ejemplo es la
zona costera sur, donde la preocupación se basa en el no poder salir a pescar,
ya que, en lo que va del año, no se ha iniciado la primera temporada de pesca
de anchoveta, lo que ha significado que nuestros pescadores locales no hayan
podido capturar ni una sola tonelada métrica. Es importante precisar que, en la
zona sur, Perú y Chile comparten un solo stock de este recurso, siendo nuestro
vecino del sur el único que puede aprovecharlo.
En los primeros
cinco meses del presente año, Chile ha recaudado 149 mil TM en su zona norte,
en cambio nuestro país, ha dejado de capturar cerca de 300 mil TM, lo que ha
significado una pérdida económica de 392 millones de soles, dinero que puede
ser destinado a la batalla contra la COVID-19.
Esta situación
requiere un llamado a nuestras autoridades. Hoy más que nunca se necesitan
facilidades para seguir trabajando en nuestros mares, de la mano de nuestro
país vecino del sur. Poco a poco, nuestro país se irá reactivando y esta
es la inyección económica que tanto necesitan nuestras regiones. ¡Juntos
podemos!
